Para terminar estas entrevistas con los alumnos y alumnas becadas por la ONGD SED en el Instituto Tecnológico Kiché Chchicastenango, donde 80 alumnos y alumnas realizan sus cursos de formación profesional de grado medio o bachillerato, he querido que el Director de este prestigioso centro, el profesor Osman García, nos hiciese su evaluación de las becas, sobre todo en estos tres últimos años de pandemia o “semipandemia”.
El profesor ha calificado las becas como una “OPORTUNIDAD DE ORO”, para los alumnos, para sus familias y para el ITECK.
No destaco sus palabras, porque tendría que destacar todas, y es mejor que las escuchéis directamente:
¡Muchas gracias profesor Osman por sus palabras, pero sobre todo por el trabajo que están haciendo con estos jóvenes! ¡Extienda la felicitación a los Hermanos Maristas, profesorado y personal auxiliar del ITECK!
Antonio Tejedor Mingo | Voluntario de SED en Guatemala
Durante dos semanas hemos estado visitando a las familias de los alumnos del internado y a aquellas que han solicitado entrar. También hemos ido de allí a quebrada, han sido unas semanas en las que no hemos parado. Los niños de Huertas (Comarapa, Bolivia) no han podido ser más agradecidos y sus familias también. Hay días que se han ido a las 10 y pico de la noche y a las 7.45h los teníamos asomados a la ventana.
Días de dar y recibir aún más. No sentíamos que nos faltara de nada (aunque después la ducha se agradecía) y se acordaban mucho de las personas que habían pasado por allí, de cada anécdota, baile y comidas. La acogida fue inmensa y como escribíamos en el Instagram del grupo, nos llevamos el corazón lleno de nombres.
Lilian Manuela Chinol Tol, es alumna de 5º curso de electrónica del ITECK. Tiene 18 años y vive en uno de los cantones o comunidades de Chichicastenango, el cantón Chulumal segundo. A veinte minutos del ITECK, si no es jueves (que hay mercado y atasco) o no ha habido un accidente o avería en alguna de las impresionantes curvas de los barrancos que tienen que superar para llegar al colegio.
Yo conozco este cantón porque hace tres años estuvimos haciendo una experiencia de solidaridad con los alumnos de 6º de mecánica del ITECK, montando unos gallineros para gente muy sencilla del cantón. Y nos tocó andar bastante, desde donde nos dejó la camioneta hasta las casitas a las que íbamos, con los materiales del gallinero a cuestas.
Es una comunidad muy humilde, con población dispersa y casitas sencillas con su pequeño terreno, “la milpa”, que es donde siembran el maíz, los frijoles y algunas verduras para el consumo propio o intercambio con otros vecinos.
Esto es lo que Lilian dice que hace su padre: agricultura. Y su madre, tejedora, como la mayoría de sus vecinas, teje telas para venderlas en el mercado de Chichi, a través de los talleres, que son los que se llevan las ganancias. Con estos datos podemos entender lo que dice Lilian de la economía de su familia.
Pero hay un salto enorme entre dos generaciones contiguas: padres e hijos. Mientras que sus padres sobreviven con una economía de subsistencia para sacar adelante a su familia, la siguiente generación, la de Lilian, habla de que ha buscado su colegio por “redes sociales”, de que le encantan las “artes industriales” y de que le interesa la “electrónica”.
Cuando termine en el ITECK el año que viene, quiere compaginar su trabajo para ayudar a sus padres, porque se lo merecen, con el estudio de “Ingeniería Mecatrónica”. Y seguro que lo logrará, no hay más que oírla hablar y sonreír, y Dios se lo va a permitir sin duda. (He tenido que consultar en internet para saber qué eso de la Ingeniería Mecatrónica. Os lo explico al final… por si…)
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¿Cómo se ha producido ese salto en las laderas del Cantón Chulumal segundo?
Pues sin duda gracias a la EDUCACIÓN que es el arma más poderosa para luchar contra la pobreza y el subdesarrollo.
Y esta es la batalla que plantea SED en Guatemala, con su Programa de BECAS para esta maravillosa gente, que no tiene otros medios para cumplir sus sueños, incluso de MECATRÓNICA en la universidad Galileo de Guatemala Capital.
El resto de la entrevista es un caso mas de superación personal, gracias a la ayuda de SED que les ha llegado a través de los Hermanos Maristas del ITECK. Y una manifestación del tremendo agradecimiento que tienen hacia las personas que hacen posible esa BECA desde España, porque para ellos es muy importante, esencial, les ha ayudado mucho…”
P.D: La Ingeniería en Mecatrónica tiene como objetivo formar profesionales capaces de crear, administrar, desarrollar y diseñar sistemas de ingeniería de alta tecnología para automatizar tareas industriales.
Nos disponemos a escribir estas líneas con el triste convencimiento de que en unas pocas horas abandonaremos Orore.
Estos últimos días han servido para seguir ofreciendo los talleres digitales a niños y jóvenes lugareños, así como mesas redondas donde hemos dirigido charlas inspiradoras y motivacionales sobre distintos temas interesantes: vocaciones, emprendimiento, roles familiares, estereotipos, etc.
El centro de recursos ha sido testigo del trabajo hecho durante estas semanas, ojalá su actividad no se detenga y siga ampliando los medios técnicos y recursos que ofrece.
Simultáneamente, también tuvimos la oportunidad de visitar la Universidad de Rongo, en la que el director y otros cargos se reunieron con nosotros con afán de establecer alguna futura colaboración. Además, nos mostraron las distintas instalaciones, departamentos y laboratorios del complejo universitario. Sin duda, una gran oportunidad para establecer posibles vínculos.
Esta semana, además, han tenido lugar las elecciones generales en Kenia. Evans nos llevó al colegio electoral donde votaba y pudimos comprobar in situ el fervor y la ilusión con la que viven estos comicios que marcarán el futuro del país.
Por último y tras las últimas sesiones en el centro de recursos, dedicamos un tiempo para decir adiós a los que han sido nuestros anfitriones, compañeros y amigos ya durante tres veranos. Comimos, bebimos, reímos y sobre todo disfrutamos de los últimos momentos junto al lago. Esta noche cuando el sol se ponga, nos iremos a dormir con los nervios del viajero principiante, que desconoce, cegado por la ilusión, las sorpresas que el inminente trayecto seguro le guarda.
José Ángel Alba, Iratxe Lejarreta, Rut Gómez y Alberto Corbí | Voluntarios/as de SED en Kenia
En Bolivia, departamento de Santa Cruz en el municipio de Comarapa; se ha realizó con estudiantes de la promoción del Colegio Marista “Gabriel Rene Moreno”, la actividad denominada “campamento de trabajo”.
Esta iniciativa está animada por la Pastoral del Colegio en conjunto con los jóvenes de la promoción que se anotan voluntariamente a participar de dicha actividad. El campamento tuvo lugar desde el 30 de julio al 5 de agosto del año en curso, donde cuarenta y nueve estudiantes dedicaron su tiempo a servir junto a la comunidad de Capillas, lugar que se encuentra en la llamada zona alta de Comarapa, camino de Cochabamba.
En esta ocasión se ayudó a la comunidad realizando la limpieza de acequias, reforestando 1400 plantines de Acacio en un área protegida y limpieza de camino.
Esto trabajo servirá de gran apoyo para la comunidad ya que fue hecho de común acuerdo entre los lugareños y los estudiantes para trabajar en conjunto. De esta forma los estudiantes fueron aprendiendo lo que es el trabajo manual de mano de los comunarios.
También durante la experiencia este año, se contó con la presencia de cuatro voluntarios del Proyecto Bolivia: Hno. Alberto, Carlos, Irene, José Damián, que junto al equipo pastoral del colegio fueron animando a los jóvenes de la promoción a una mejor vivencia del Campo Trabajo.
Damos gracias a Dios por estos jóvenes que voluntariamente hacen este servicio con el único objetivo de ayudar al prójimo y servir a los demás.
Edy Sebastián Chicoj Ixtán es un alumno del ITECK de Chichicastenango, tiene 16 años y estudia 5º de Mecánica. Vive en un cantón próximo a Chichi. En su familia son siete hermanos y el es el 5º. Su padre es vendedor y su madre trabaja haciendo telas.
Preguntado por qué eligió venir al ITCEK, contesta:
Elegí venir al ITEK porque quería estudiar mecánica. Desde niño me gustaba mucho armar y desarmar cosas y por eso quiero estudiar mecánica y en el ITECK, porque dan una formación muy avanzada. Lo que más me gusta de la carrera es las Matemáticas y la Física y Química, que me cuesta entenderla, pero me gusta mucho.
Ya tengo planes para cuando termine. Quiero trabajar para ayudar a mis padres, y quiero montar un taller de mecánica en Cobán con mis tíos porque allí hay mas demanda. Estoy al habla con ellos; ya tenemos un terrenito para el taller. En vacaciones iré con mi padre a vender para ayudar y tener uno dinerito.
La beca de SED es un gran apoyo para mí y un honor; es muy importante porque mis padres tienen pocos recursos para tantos hermanos. Como en el ITECK estamos estudiando en “dos burbujas” y días alternos, por el covid, los días que me toca no venir a clase yo ayudo a mi padre trabajando en el campo de 6 de la mañana a 7 de la tarde. Por eso la ayuda de SED es muy importante para mí y para mi familia. Es como tener un ánimo para salir adelante. No sé cómo expresar lo mucho que lo agradezco.
Es una gran satisfacción ver como estos jóvenes becados no se conforman con que les den y ellos mismos ponen su trabajo y su esfuerzo para ayudar a sus familias y salir adelante con sus sueños.
A lo mejor no saben expresar muy bien su gran agradecimiento a SED y las personas que les ayudan, pero con su esfuerzo por hacer rendir esa ayuda demuestran hasta dónde llega su: ¡MUCHAS GRACIAS!
No dejéis de escuchar el testimonio de Edy Sebastián
Estos jóvenes nos proponen “11 razones” para colaborar con las becas de SED en Guatemala.
Y esto si que son RAZONES, porque no son palabras que pueda llevarse el viento o que no significan nada. Un “compromiso” que transforma VIDAS, FAMILIAS, PERSONAS… como nos dice una de la muchacha becadas por SED.
No sigo, porque no hacen falta palabras. Esto son sentimientos que brotan del corazón, mucho más valiosos. ¡DISFRUTADLOS!
Antonio Tejedor Mingo | Voluntario de SED en Guatemala
Hoy me ha tocado a mí la jornada de: “LAS BECAS DE SED LLEGAN A LOS BECADOS.”
¿Y por qué? Pues porque por la mañana he participado y comprobado de primer mano cómo se distribuía el dinero de las becas de SED de los meses de mayo, junio y julio a los padres y madres de los becados de Chichicastenango que no estudian en el ITECK.
Dos aclaraciones: Primera, el dinero de la beca de SED se distribuye en tres entregas para evitar que algunas familias se lo gastaran en cosas distintas de pagar la colegiatura de sus hijos e hijas, y para que, en la 2ª y 3ª entregas, se puedan pedir la notas de las evaluaciones, para poder hacer un seguimiento de los resultados y el esfuerzo de los alumnos becados.
Y segunda: en Chichicastenango, SED tiene becados a 148 alumnos y alumnas. De estos, 79 cursan sus estudios de formación profesional de grado medio o bachillerato (16 a 21 o más años) en el Instituto Tecnológico Kitché, que dirigen los Hermanos Maristas. Otros 57 lo hacen en escuelas públicas de nivel básico o diversificado, (13 a 16 años) como la Comunal, el INEF o la Experimental, en horario de mañana o de tarde. Y 12 jóvenes en el catón Mactzul primero, que está a 16 km. de Chichi, pero se tarda casi una hora en llegar. También son alumnos y alumnas de Básico: 1º, 2º y 3º (13 a 16 años) pero de zona rural de difícil acceso.
En total 148 alumnos y alumnas, la inmensa mayoría indígenas, de la etnia quiché, y con un poder económico muy bajo, que sin esta ayuda no tendrían acceso a la educación, que en España llamamos Secundaria o Profesional.
Durante estas semanas anteriores me he estado entrevistando personalmente con la mayoría de los alumnos y alumnas becadas de SED del ITECK, para intentar animarles en sus estudios, aunque he podido comprobar que están muy motivados y son muy conscientes de que, con la BECA DE SED, tienen una oportunidad que no pueden dejar escapar para salir adelante y lograr que sus sueños se conviertan en realidad.
Y para completar la jornada de entrega de becas, me he desplazado 16 km, al cantón de Mactzul primero. Los 8 primeros km han sido por carretera hasta la bella laguna de Lemoa, y ahí hemos “agarrado” el único camino de tierra que llega al Instituto de Básico del cantón Mactzul primero.
Para otros 8 km hemos tardado 50 minutos, y con suerte de que no llovía y no había a penas tráfico por la hora que era. El instituto público esta en una zona rural muy extensa (hay al menos seis cantones, entre valles y barrancos impresionantes). El Mactzul primero es el más cercano a Chichi y en él estudian 56 alumnos de los cuales 12 están también becados por SED.
Al llegar al Instituto del Mactzul primero, hemos podido saludar a las madres y padres de los alumnos y alumnas becadas. He distribuido personalmente el dinero de la beca de estos tres meses y les hemos asegurado, tanto a los padres y madres como al Director y profesorado, que vamos a seguir apoyando a aquellos estudiantes que quieran seguir estudiando.
Lo difícil en estas zonas es que los padres no pongan a sus hijos a trabajar, que es lo más urgente, y permitan que sus hijos sigan estudiando, sobre todo las niñas.
Hemos estado hablando con el Director, el Profesor Antonio Calel Canil. Tiene 48 años y es un enamorado de la educación y comprometido con la realidad de falta de recursos de la zona, desde humanos hasta económicos. En el Macztul uno, es director y da clase por la tarde (14 a 17h) y lo compagina, por las mañanas (de 7:30 a 12:30) con la escuela de Primaria del Mactzul seis, en que daba clase.
Pero hace un mes se fueron casi todos sus compañeros porque aprobaron las oposiciones y nadie quiere estar en esa zona tan alejada de todo. Se han quedado tres profesores para atender a 180 alumnos. El da clase 4º, 5º y 6º (56 alumnos) y lleva la Dirección de la escuela:
Una vez más os puedo asegurar que las becas SED llegan a los becados, porque lo he entregado yo personalmente, pudiendo comprobar cuan importante es para para ellos.
Antonio Tejedor Mingo | Voluntario de SED en Guatemala
Detrás de estas maravillosas montañas, se esconden multitud de aldeas donde las mujeres siguen sometidas al antojo del hombre. Es como si hubiéramos retrocedido 100 años en la historia de la humanidad.
Simplemente, las mujeres carecen de derechos. No tienen derecho a la educación. La mayoría de ellas no saben leer ni escribir. Se dedican a servir al hombre, cuidar de sus hijos, tener la casa arreglada, lavar los trastos y ropa de la casa y, por supuesto, la comida en la mesa para cuando el “jefe” llega.
Ellas no tienen derecho a trabajar fuera de su casa. No se las ve capacitadas para ejercer los mismos trabajos que sus esposos. El encargado de llevar “pisto” a casa es el marido.
No tienen derecho a decir “No, esta noche no me apetece”. Son maltratadas y violadas por sus maridos en un tanto por ciento muy elevado. La violencia machista está instaurada como algo natural. No existe la denuncia. Todo se normaliza.
Las hermanas trabajan todo esto. Consideran que es importante ir generando cambios en las relaciones de pareja para que los niños y niñas vayan cambiando la situación en generaciones posteriores. Tanto los hombres como las mujeres, reciben charlas y talleres que hablan sobre la violencia, relaciones sexuales, trabajo…
Estas reuniones se realizan, de momento, por separado. De esta forma, se garantiza la libertad de expresión por ambas partes.
A las mujeres se les enseña a quererse y cuidarse, a decir “NO, BASTA” y que pueden denunciar las situaciones de abuso que se producen en el hogar hacia ellas y sus hijas. Se les anima a salir de casa para acudir a las reuniones y trabajar si se les diera la oportunidad.
Se les da clases de alfabetización y se trabaja con líderes femeninas de todas las aldeas que puedan abrir los ojos de los suyos con algo de formación. A los hombres, se les enseña el trato de igualdad hacia sus mujeres. A respetarlas, escucharlas y compartir las tareas de la casa y el cuidado de sus hijos.
Ya se ha conseguido algo: les dejan acudir a las reuniones de capacitación de la escuela y a las clases de alfabetización. Por algo se empieza.
Esta tarea es muy complicada y necesitará años de trabajo con ambas partes ya que las mujeres lo perciben como algo natural y, alguna de ellas, se resiste al cambio aunque, probablemente, más por miedo que por ganas.
Hoy hemos tenido una evaluación de los talleres y de los cambios que han producido en el pensamiento de los padres de la escuela. La teoría se la saben. En práctica la han puesto pocos de ellos, pero estoy convencida de que, con mucho esfuerzo, se conseguirán pequeños cambios que ayudarán a estas mujeres a llevar una vida más digna y tranquila.
Seguiremos acompañando a ambas partes porque la educación, es el arma más poderosa para cambiar conductas no deseadas.
Ángela Oralia Ajanel Ventura es una alumna de 18 años que estudia 5º curso de Administración de empresas en el ITECK de Chichicastenango gracias a la beca de la ONGD SED.
Vive en un cantón cercano de Chichi con su madre y dos hermanos. Desafortunadamente, su padre hace tiempo que de desinteresó por sus estudios. Su hermano pequeño nació con unos parásitos debajo de la piel de los brazos que le producen infecciones y enferma con frecuencia. El gasto en medicinas complica más la difícil economía de la familia.
En estas condiciones, la BECA de SED es indispensable para que Ángela pueda seguir estudiando y lograr un trabajo que ayude a la precaria economía de la familia.
Como ella dice: “Estábamos muy preocupados mi mamá y yo porque si no nos daban la beca no podría seguir aquí. Y cuando nos dijeron que nos la daban me puse muy contenta porque yo estoy muy contenta en el ITECK”.
Los profesores me han tratado de maravilla. El primer año, cuando empecé aquí, yo no tenía ni idea de inglés, porque en el colegio de básico no se daba. Y yo no entendía nada y no sabía qué hacer. Hablé con la profesora y me dijo que me iba a ayudar al terminar las clases, y que lo íbamos a solucionar. Y así fue. Pero la sorpresa es que a esas clases de apoyo se quedaban también otro grupo de alumnos que tenían el mismo problema que yo. Y salimos adelante. Durante la pandemia los profesores también nos ayudaron mucho con las tareas y estuvieron muy pendientes de nosotros.
Estoy muy contenta de poder estudiar aquí. A las personas que pagan mi beca les digo que se lo AGRADEZCO DE TODO CORAZÓN”.
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